miércoles, 29 de diciembre de 2010

Estoy como el escriba sentado.
Pero una energía me inunda a cada momento.
Destrucción, creación.
Estoy entre paréntesis, puntos y comas.

jueves, 23 de diciembre de 2010

Noto como todas mis extremidades bailan con el ritmo del agua. Descansando las estrellas encuentran una luz verde en esa tierra.

martes, 7 de diciembre de 2010

He descubierto que algo no me deja decir la verdad.
Quiero enamorarme.
No se si es el orgullo,
o el miedo.
O mi egoísmo.

domingo, 5 de diciembre de 2010

Su existencia es la demostración de mi superación,
eso hace que yo eche de menos a veces esos tiempos,
porque yo dí todo.

sábado, 4 de diciembre de 2010

Me gustaría volver a esa oscuridad llena de luz. No decir esas palabras que sonaron tan seguras. No decir nada. Hacerte callar. Dejarte hacer. Dejarme llevar.
Y si aún así me dieses la razón, saltar sobre ti. Hacer lo que deberíamos hacer, nada de palabras, nada de excusas.
Demostrarte que porque intenté no agobiar, no significaba que no me gustaría estar encima tuyo. Por negarme el amor, no me niego la felicidad. De hecho no me niego nada, solo intento que nada me dañe, que nada me retrase.
Demostrarte que para mi estaba siendo algo importante, algo muy agradable, algo que no olvidaré. Pero resultó como si no hubiese sido nada para mí. Como si no pasaba nada. Cuando mi intención no era otra que trasmitir seguridad, confianza.

Pero como siempre me mal interpretaron. Pese a intentar no hacer ningún papel.
No quiero ser personaje de novela, ni actor, ni director. Pero aún así sin querer me tomaron como un papel de personaje ajeno a los demás, a los sentimientos, inmortal, infantil, egoísta, libre, cosas que no soy.

jueves, 2 de diciembre de 2010

Me siento enfrente de esa fotografía destruida.
Te puedo ver, pese a que ya no estás.
El río parece llamarme.

Las hojas al pasar por encima de mi cabeza,
me recuerdan tu partida.
Te fuiste como ellas lo hacen ahora
de las ramas de esos árboles.

Si me preguntas el color que eras,
no sabría decirte.
Y tu olor solo lo recuerdo a veces.

Poco a poco me voy deshaciendo
de tu pasada presencia.
De tu caduca impresión,
en mis manos,
y corto unos lazos
que están amarrando,
que reducen mi fricción.

Y un mechón notó descender,
mi cabello crece,
desapareciste y lo corté.

El paisaje parece el mismo.
Pero nunca lo volverá a ser.

Poco a poco voy deslizando
tu pasada presencia,
mis talones la notan descender.

Y es así como mi carga disminuye,
como noto mi velocidad aumentar
y mi altura decrecer.