viernes, 20 de abril de 2012

No es positivo mentirse a uno mismo.
Pero si es positivo de vez en cuando, cuando nuestra niña interior lo necesita, contarnos un cuento. No un cuento Disney, pero sí un cuento.

Yo me cuento cuentos, valga la redundancia, que sólo me gustan a mi. Introduzco piratas, niños rebeldes, mujeres con carácter que no se dejan gobernar, a mi misma mejorando en algún deporte...

Y después de escuchar el cuento o cuentos, reflexiono, y encuentro soluciones reales, para mi vida. Y sino, al menos tengo unos minutos para mi persona sola. Al menos tengo unos minutos de evasión sana.